Luego de compartir las experiencias en torno a las alternativas a la minería, así como los avances en la protección de las vocaciones y potencialidades económico productivas de los municipios, territorios indígenas y áreas protegidas, en la tarde, la reunión continuó con trabajos en grupos que permitieron profundizar en las discusiones sobre los caminos posibles a transitar hacia municipios y territorios indígenas libres de actividad minera. Fueron cuatro los grupos que se conformaron, los cuales se presentan a continuación junto a la exposición de sus conclusiones.
Grupo 1: Normativas municipales para la defensa de la vocación productiva agroecológica y ecoturística
Foto: Archivo Fundación Solón, 2025.
En este grupo los compañeros y compañeras de Alto Beni y Palos Blancos compartieron su experiencia para la aprobación de sus leyes de municipios libres de actividad minera. Varios de ellos destacaron que el proceso empezó desde las bases, con pronunciamientos de diferentes organizaciones interculturales agroecológicas e indígenas, y en respuesta a permanentes avasallamientos de mineros que buscaban ingresar a su territorio con engaños, dinero y dividiendo a las comunidades.32
En sus testimonios destacaron el importante rol de la Central de Cooperativas El Ceibo para que los concejales municipales se reúnan y aprueben las leyes de municipios libres de actividad minera. Una propuesta del grupo fue socializar un proyecto de ley municipal tipo con Rurrenabaque, San Buenaventura y otros municipios que pudieran estar interesados en avanzar hacia la declaratoria de municipios libres de minería.
Grupo 2: Normas de territorios indígenas y de áreas protegidas frente a la minería
Foto: Archivo Fundación Solón, 2025.
En su debate, este grupo conformado por dirigentes indígenas y equipos de guardaparques, identificó que la problemática de la minería y sus impactos en la región tienen varias aristas. Primero, existe un riesgo permanente de que se otorguen contratos mineros en ríos y espacios de los territorios indígenas y áreas protegidas. Segundo, la minería ilegal se encuentra en expansión, provocando división y conflictos a su paso en las comunidades donde pretenden instalarse. Y tercero, las comunidades indígenas y poblaciones amazónicas enfrentan la contaminación de los ríos con mercurio que afectan a la salud de las personas y de la biodiversidad. Frente a ello se destacó la importancia de declararse como territorios indígenas libres de minería para que, en el marco de la libre determinación, las instancias estatales garanticen el respeto a la voluntad de cada pueblo.
Asimismo, se planteó que los equipos de protección de las áreas protegidas y las autoridades indígenas trabajen de manera coordinada y conozcan mutuamente las competencias que tiene cada uno para fortalecer el control territorial.
Por último, se vio la importancia de impulsar la elevación a rango de ley de los decretos de creación de las áreas protegidas y proponer modificaciones a Ley No. 535 de Minería y Metalurgia (artículo 93, III, c) para frenar la contaminación de los ríos y las fuentes de agua.
Grupo 3: Ley nacional y restricción a la otorgación de derechos mineros
Foto: Archivo Fundación Solón, 2025.
Este grupo discutió las estrategias para que la suspensión en la otorgación de derechos mineros sea definitiva y no sólo temporal en los municipios de Palos Blancos, Alto Beni y otros que se vayan sumando.
Para lograr una restricción permanente se abordó la necesidad de fortalecer el Proyecto de Ley Nacional de Alto Beni y Palos Blancos para que restrinja la tramitación y otorgación de derechos mineros en municipios y territorios indígenas agroecológicos y ecoturísticos.
El grupo planteó la modificación de la Ley No. 535 de Minería y Metalurgia (artículo 93, III) para que prohíba la realización de actividades mineras en municipios y territorios indígenas originarios campesinos que sean agroecológicos, ecoturisticos y/o aquellos cuya vocación productiva no sea compatible con la actividad minera.
Grupo 4: Control y defensa de los territorios y municipios frente a avasallamientos mineros.
Foto: Archivo Fundación Solón, 2025.
Los participantes de este grupo centraron su trabajo en la identificación de acciones para el control y defensa de los territorios y municipios frente a la actividad minera. En este sentido, propusieron socializar en los municipios de Rurrenabaque, San Buenaventura y otros territorios de la región, las leyes municipales de Palos Blancos y Alto Beni para fortalecer la protección territorial. Asimismo, se resaltó la importancia de hacer cumplir los mandatos internos, particularmente las resoluciones que restringen la actividad minera en estos territorios.
Se planteó también la necesidad de establecer una Red de control territorial que garantice una comunicación efectiva entre los municipios y los territorios, permitiendo una respuesta coordinada ante posibles amenazas. Además, se propuso la conformación de mesas de trabajo que impulsen la consolidación de territorios y municipios libres de minería, fortaleciendo así los mecanismos de protección y autodeterminación de las comunidades frente a la explotación de sus recursos naturales.
¿Qué pasos siguen?
Como última actividad de la jornada se formaron dos grupos, esta vez por actores zonificados. El primero conformado por las instituciones y organizaciones de la zona Rurrenabaque – San Buenaventura y el segundo de la zona Palos Blancos – Alto Beni. En ellos las y los integrantes compartieron las conclusiones de los grupos anteriores y con esos aportes definieron los siguientes pasos en el corto plazo para avanzar hacia los municipios y territorios indígenas libres de actividad minera. A continuación, se presentan los acuerdos alcanzados.
Grupo 1: Zona Rurrenabaque – San Buenaventura
Foto: Archivo Fundación Solón, 2025
Trabajar en un proyecto de Ley municipal que sirva de base para la discusión en los concejos municipales de Rurrenabaque y San Buenaventura.
Para el caso de San Buenaventura, que un sector social haga la solicitud formal al gobierno municipal de trabajar en un proyecto de Ley municipal de declaración de espacio libre de minería, para respaldar la iniciativa.
Considerar todas las certificaciones que tiene el Destino Turístico Rurrenabaque Madidi – Pampas, principalmente las vinculadas a “destino sostenible” conseguidas a la fecha, para fortalecer la demanda de las leyes municipales, ya que la actividad minera perjudica estos los logros internacionales.
Una vez se tenga borradores de Ley que estos sean socializados ampliamente con la población y los sectores vinculados al ecoturismo y turismo comunitario.
Que los territorios indígenas puedan emitir sus propias declaraciones de territorios libres de minería mediante resoluciones de sus máximas instancias de toma de decisiones orgánicas, a fin de crear corredores libres de actividad minera.
Apoyar la elevación a rango de Ley nacional el Decreto Supremo de creación de la Reserva de la Biósfera y TCO Pilón Lajas, así como al proyecto de Ley nacional del Madidi que ya cuenta con aprobación en la Cámara de Senadores.
Grupo 2: Zona Palos Blancos – Alto Beni
Foto: Archivo Fundación Solón, 2025.
Impulsar la actualización del proyecto de Ley Nacional que declara a Palos Blancos y Alto Beni libres de actividad minera, para incorporar medidas que garanticen la restricción definitiva de las jurisdicciones de ambos municipios en el catastro minero, así como incluir una modificación a la Ley No 535 para prohibir las actividades mineras en municipios y territorios indígenas con vocación productiva agroecológica y/o ecoturística.
Demandar a la AJAM proceda con la restricción definitiva en la otorgación de derechos mineros dentro de las jurisdicciones de Palos Blancos y Alto Beni, en cumplimiento de la Sentencia del Juez de Palos Blancos de inmediato cumplimiento hasta que se conozca la Sentencia de revisión del Tribunal Constitucional.
Avanzar en la construcción participativa de reglamentos de control social frente a actividades mineras en ambos municipios.
Que en instancias orgánicas, el pueblo Mosetén analice la declaratoria de territorio libre de actividad minera.
Conclusiones A manera de conclusiones, en este apartado se busca rescatar y resumir las ideas fuerza, las reflexiones, y las tareas identificadas para seguir caminando después de esta “primera reunión de municipios y territorios indígenas agroecológicos y ecoturísticos libres de minería”, espacio que permitió congregar a actores diversos pero con objetivos comunes en la defensa de sus espacios, medios y formas de vida.
En cuanto a la problemática del expansionismo minero aurífero en la Amazonía boliviana, en la reunión se recalcó – una vez más – que estamos en medio del auge en la demanda y el aumento de los precios del oro a nivel internacional, que repercute en el incremento de la actividad minera en el norte de La Paz y parte del Beni. Este crecimiento local supera la capacidad regulatoria y de control estatal provocando así una actividad minera, principalmente ilegal, con graves impactos a su paso.
Las distintas exposiciones en los paneles dieron cuenta de los intentos de algunos actores mineros de tomar nuevas áreas para la explotación aurífera, situación que provocó la reacción de los actores locales: de las cooperativas agrícolas, las comunidades interculturales e indígenas mosetenes en Palos Blancos y Alto Beni, así como de la población urbana, indígenas tsimanes, tacanas y mosetenes, y alcaldías de Rurrenabaque y San Buenaventura que no dudaron en tomar medidas de hecho, pronunciarse en contra de la explotación minera, a través de sus instancias orgánicas, y demandar a las autoridades competentes las medidas de control correspondientes.
Las y los expositores dejaron en claro que su reacción obedeció a la defensa de sus medios de vida: la agroecología, los sistemas productivos comunitarios, el ecoturismo y turismo comunitario que brindan sustento a las familias y que son el resultado de largos procesos de aprendizaje, de organización, y de búsqueda de alternativas sostenible con el ambiente.
Las experiencias de las y los distintos actores permitieron identificar una serie de alternativas de acción locales a través de las cuales han logrado llamar la atención nacional y de autoridades estatales, que pasan por: los acuerdos colectivos orgánicos de no permitir el ingreso de actores mineros, la promulgación de normas municipales y departamentales de declaratoria de 0 minería, el fortalecimiento de los planes de manejo en las áreas protegidas, la presentación de acciones de protección de derechos como las acciones populares y su respectiva exigibilidad de cumplimiento.
Por otra parte, el trabajo en grupos permitió identificar los retos aún existentes para garantizar espacios libres de actividad y contaminación minera, que van desde los mecanismos de control social locales y la protección de quienes desarrollan las actividades de monitoreo y control, la operatividad de las normas promulgadas y la modificación a la Ley minera para que contemple la restricción de actividades mineras en lugares donde la vocación productiva no sea compatible con esta.
Finalmente, en las acciones a desarrollar en el corto plazo, las y los actores de Rurrenabaque y San Buenaventura ven una oportunidad para avanzar en la construcción participativa de normas municipales similares a las de Palos Blancos y Alto Beni para proteger el ecoturismo y el turismo comunitario.
Desde el Pilón Lajas se vió la importancia de seguir fortaleciendo la seguridad del área y territorio indígena frente a las actividades extractivas, para lo cual se debe implementar acciones combinadas entre el cuerpo de protección y las instancias orgánicas indígenas como ser: la declaratoria de territorio libre de actividad minera y la elevación a rango de Ley nacional de su Decreto Supremo 23110 de creación.
En cuanto a Palos Blancos y Alto Beni, la ruta implica al menos tres acciones: La primera, analizar la incorporación de un ajuste al proyecto de Ley nacional de declaratoria de municipios libres de minería, para incluir una modificación de la Ley No. 535 respecto a las restricciones de las actividades mineras. La segunda, insistir con la AJAM para que proceda con la restricción de las actividades mineras en sus jurisdicciones como manda la acción popular de Palos Blancos y; la tercera, avanzar en la operatividad de las leyes municipales promulgadas así como en la declaratoria del territorio mosetén como espacio libre de minería.
El evento concluyó con la propuesta de un reencuentro de todos los actores presentes en una segunda reunión en el que puedan compartir los avances logrados, los retos enfrentados, y los nuevos desafíos en este caminar. Se espera además, que en el siguiente espacio se pueda sumar a otros invitados de la región, para seguir estrechando lazos en el marco de los municipios y territorios indígenas libres de actividad minera.
fundacionsolon.org 
Luego de compartir las experiencias en torno a las alternativas a la minería, así como los avances en la protección de las vocaciones y potencialidades económico productivas de los municipios, territorios indígenas y áreas protegidas, en la tarde, la reunión continuó con trabajos en grupos que permitieron profundizar en las discusiones sobre los caminos posibles a transitar hacia municipios y territorios indígenas libres de actividad minera. Fueron cuatro los grupos que se conformaron, los cuales se presentan a continuación junto a la exposición de
sus conclusiones.
Grupo 1: Normativas municipales para la defensa de la vocación productiva
agroecológica y ecoturística
En este grupo los compañeros y compañeras de Alto Beni y Palos Blancos compartieron su experiencia para la aprobación de sus leyes de municipios libres de actividad minera. Varios de ellos destacaron que el proceso empezó desde las bases, con pronunciamientos de diferentes organizaciones interculturales agroecológicas e indígenas, y en respuesta a permanentes avasallamientos de mineros que buscaban ingresar a su territorio con engaños, dinero y dividiendo a las comunidades.32
En sus testimonios destacaron el importante rol de la Central de Cooperativas El Ceibo para que los concejales municipales se reúnan y aprueben las leyes de municipios libres de actividad minera. Una propuesta del grupo fue socializar un proyecto de ley municipal tipo con Rurrenabaque, San Buenaventura y otros municipios que pudieran estar interesados en avanzar hacia la declaratoria de municipios libres de minería.
Grupo 2: Normas de territorios indígenas y de áreas protegidas frente a la minería
En su debate, este grupo conformado por dirigentes indígenas y equipos de guardaparques, identificó que la problemática de la minería y sus impactos en la región tienen varias aristas. Primero, existe un riesgo permanente de que se otorguen contratos mineros en ríos y espacios de los territorios indígenas y áreas protegidas. Segundo, la minería ilegal se encuentra en expansión, provocando división y conflictos a su paso en las comunidades donde pretenden instalarse. Y tercero, las comunidades indígenas y poblaciones amazónicas enfrentan la contaminación de los ríos con mercurio que afectan a la salud de las personas y
de la biodiversidad. Frente a ello se destacó la importancia de declararse como territorios indígenas libres de minería para que, en el marco de la libre determinación, las instancias estatales garanticen el respeto a la voluntad de cada pueblo.
Asimismo, se planteó que los equipos de protección de las áreas protegidas y las
autoridades indígenas trabajen de manera coordinada y conozcan mutuamente las competencias que tiene cada uno para fortalecer el control territorial.
Por último, se vio la importancia de impulsar la elevación a rango de ley de los decretos de creación de las áreas protegidas y proponer modificaciones a Ley No. 535 de Minería y Metalurgia (artículo 93, III, c) para frenar la contaminación de los ríos y las fuentes de agua.
Grupo 3: Ley nacional y restricción a la otorgación de derechos mineros
Este grupo discutió las estrategias para que la suspensión en la otorgación de derechos mineros sea definitiva y no sólo temporal en los municipios de Palos Blancos, Alto Beni y otros que se vayan sumando.
Para lograr una restricción permanente se abordó la necesidad de fortalecer el Proyecto de Ley Nacional de Alto Beni y Palos Blancos para que restrinja la tramitación y otorgación de derechos mineros en municipios y territorios indígenas agroecológicos y ecoturísticos.
El grupo planteó la modificación de la Ley No. 535 de Minería y Metalurgia (artículo 93, III) para que prohíba la realización de actividades mineras en municipios y territorios indígenas originarios campesinos que sean agroecológicos, ecoturisticos y/o aquellos cuya vocación productiva no sea compatible con la actividad minera.
Grupo 4: Control y defensa de los territorios y municipios frente a avasallamientos mineros.
Los participantes de este grupo centraron su trabajo en la identificación de acciones para el control y defensa de los territorios y municipios frente a la actividad minera. En este sentido, propusieron socializar en los municipios de Rurrenabaque, San Buenaventura y otros territorios de la región, las leyes municipales de Palos Blancos y Alto Beni para fortalecer la protección territorial. Asimismo, se resaltó la importancia de hacer cumplir los mandatos internos, particularmente las resoluciones que restringen la actividad minera en estos
territorios.
Se planteó también la necesidad de establecer una Red de control territorial que garantice una comunicación efectiva entre los municipios y los territorios, permitiendo una respuesta coordinada ante posibles amenazas.
Además, se propuso la conformación de mesas de trabajo que impulsen la consolidación de territorios y municipios libres de minería, fortaleciendo así los mecanismos de protección y autodeterminación de las comunidades frente a la explotación de sus recursos naturales.
¿Qué pasos siguen?
Como última actividad de la jornada se formaron dos grupos, esta vez por actores zonificados. El primero conformado por las instituciones y organizaciones de la zona Rurrenabaque – San Buenaventura y el segundo de la zona Palos Blancos – Alto Beni. En ellos las y los integrantes compartieron las conclusiones de los grupos anteriores y con esos aportes definieron los siguientes pasos en el corto plazo para avanzar hacia los municipios y territorios indígenas libres de actividad minera. A continuación, se presentan los acuerdos alcanzados.
Grupo 1: Zona Rurrenabaque – San Buenaventura
Grupo 2: Zona Palos Blancos – Alto Beni
Conclusiones
A manera de conclusiones, en este apartado se busca rescatar y resumir las ideas fuerza, las reflexiones, y las tareas identificadas para seguir caminando después de esta “primera reunión de municipios y territorios indígenas agroecológicos y ecoturísticos libres de minería”, espacio que permitió congregar a actores diversos pero con objetivos comunes en la defensa de sus espacios, medios y formas de vida.
En cuanto a la problemática del expansionismo minero aurífero en la Amazonía boliviana, en la reunión se recalcó – una vez más – que estamos en medio del auge en la demanda y el aumento de los precios del oro a nivel internacional, que repercute en el incremento de la actividad minera en el norte de La Paz y parte del Beni. Este crecimiento local supera la capacidad regulatoria y de control estatal provocando así una actividad minera, principalmente ilegal, con graves impactos a su paso.
Las distintas exposiciones en los paneles dieron cuenta de los intentos de algunos actores mineros de tomar nuevas áreas para la explotación aurífera, situación que provocó la reacción de los actores locales: de las cooperativas agrícolas, las comunidades interculturales e indígenas mosetenes en Palos Blancos y Alto Beni, así como de la población urbana, indígenas tsimanes, tacanas y mosetenes, y alcaldías de Rurrenabaque y San Buenaventura que no
dudaron en tomar medidas de hecho, pronunciarse en contra de la explotación minera, a través de sus instancias orgánicas, y demandar a las autoridades competentes las medidas de control correspondientes.
Las y los expositores dejaron en claro que su reacción obedeció a la defensa de sus medios de vida: la agroecología, los sistemas productivos comunitarios, el ecoturismo y turismo comunitario que brindan sustento a las familias y que son el resultado de largos procesos de aprendizaje, de organización, y de búsqueda de alternativas sostenible con el ambiente.
Las experiencias de las y los distintos actores permitieron identificar una serie de alternativas de acción locales a través de las cuales han logrado llamar la atención nacional y de autoridades estatales, que pasan por: los acuerdos colectivos orgánicos de no permitir el ingreso de actores mineros, la promulgación de normas municipales y departamentales de declaratoria de 0 minería, el fortalecimiento de los planes de manejo en las áreas protegidas, la presentación de acciones de protección de derechos como las acciones populares y su respectiva exigibilidad de cumplimiento.
Por otra parte, el trabajo en grupos permitió identificar los retos aún existentes para garantizar espacios libres de actividad y contaminación minera, que van desde los mecanismos de control social locales y la protección de quienes desarrollan las actividades de monitoreo y control, la operatividad de las normas promulgadas y la modificación a la Ley minera para que contemple la restricción de actividades mineras en lugares donde la vocación productiva no sea compatible con esta.
Finalmente, en las acciones a desarrollar en el corto plazo, las y los actores de Rurrenabaque y San Buenaventura ven una oportunidad para avanzar en la construcción participativa de normas municipales similares a las de Palos Blancos y Alto Beni para proteger el ecoturismo y el turismo comunitario.
Desde el Pilón Lajas se vió la importancia de seguir fortaleciendo la seguridad del área y territorio indígena frente a las actividades extractivas, para lo cual se debe implementar acciones combinadas entre el cuerpo de protección y las instancias orgánicas indígenas como ser: la declaratoria de territorio libre de actividad minera y la elevación a rango de Ley nacional de su Decreto Supremo 23110 de creación.
En cuanto a Palos Blancos y Alto Beni, la ruta implica al menos tres acciones: La primera, analizar la incorporación de un ajuste al proyecto de Ley nacional de declaratoria de municipios libres de minería, para incluir una modificación de la Ley No. 535 respecto a las restricciones de las actividades mineras. La segunda, insistir con la AJAM para que proceda con la restricción de las actividades mineras en sus jurisdicciones como manda la acción popular de Palos Blancos y; la tercera, avanzar en la operatividad de las leyes municipales promulgadas así como en la declaratoria del territorio mosetén como espacio libre de minería.
El evento concluyó con la propuesta de un reencuentro de todos los actores presentes en una segunda reunión en el que puedan compartir los avances logrados, los retos enfrentados, y los nuevos desafíos en este caminar. Se espera además, que en el siguiente espacio se pueda sumar a otros invitados de la región, para seguir estrechando lazos en el marco de los municipios y territorios indígenas libres de actividad minera.
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