Como se vio anteriormente, los precios de los aceites vegetales tuvieron fuertes incrementos en el 2021 y 2022. La AIE proyecta que los mismos tengan un leve descenso durante esta década, sin embargo, la consecuencia de los altos precios es que los mismos se mantienen por encima de su tendencia histórica, afectando a los mercados mundiales de aceite vegetal y la demanda de biodiésel. Esto es relevante porque el aceite vegetal constituye entre el 85% y 90% del costo del biodiésel (Timilsina & Zilberman, 2014).
OCDE-FAO proyecta que el precio del biodiésel en 2023 presente una disminución y que después de 2024 hasta el 2031, los precios reales tengan un descenso constante y leve.
No se cuenta con información sobre los precios que tendrán el biodiésel y HVO en Bolivia, pero, bajo el supuesto que los mismos sean fijados a nivel internacional, se podría analizar con base en la proyección hecha por la OCDE-FAO, considerando también que el costo de biodiésel de segunda generación es mayor que el biodiésel de primera generación. Según éstos datos, los precios de los biocombustibles, para el periodo 2023 y 2031, estarán entre 1 y 0,9 centavos de dólar el litro (entre Bs 6,93 y Bs 6,28).
El precio del HVO es mucho más difícil de conocer, pero, por datos de Greenea, a diciembre de 2020, la tonelada habría costado aproximadamente 1.700 dólares, lo que es 1,7 dólares el litro (Bs 11,8). Esta estimación, si se utilizara de referencia para el país, estaría por encima del: estimado para el biodiésel (entre Bs 6,93 y Bs 6,28), del precio promedio de importación del diésel (Bs 10), y muy por encima el precio subvencionado de diésel en el mercado interno que es de Bs 3,72 el litro[1].
[1] Según las estimaciones de YPFB, el barril de biodiésel que salga de estas instalaciones, tendrá un costo un 60% inferior que un barril de petróleo fósil importado con los precios actuales del mercado internacional.
fundacionsolon.org 
Como se vio anteriormente, los precios de los aceites vegetales tuvieron fuertes incrementos en el 2021 y 2022. La AIE proyecta que los mismos tengan un leve descenso durante esta década, sin embargo, la consecuencia de los altos precios es que los mismos se mantienen por encima de su tendencia histórica, afectando a los mercados mundiales de aceite vegetal y la demanda de biodiésel. Esto es relevante porque el aceite vegetal constituye entre el 85% y 90% del costo del biodiésel (Timilsina & Zilberman, 2014).
OCDE-FAO proyecta que el precio del biodiésel en 2023 presente una disminución y que después de 2024 hasta el 2031, los precios reales tengan un descenso constante y leve.
No se cuenta con información sobre los precios que tendrán el biodiésel y HVO en Bolivia, pero, bajo el supuesto que los mismos sean fijados a nivel internacional, se podría analizar con base en la proyección hecha por la OCDE-FAO, considerando también que el costo de biodiésel de segunda generación es mayor que el biodiésel de primera generación. Según éstos datos, los precios de los biocombustibles, para el periodo 2023 y 2031, estarán entre 1 y 0,9 centavos de dólar el litro (entre Bs 6,93 y Bs 6,28).
El precio del HVO es mucho más difícil de conocer, pero, por datos de Greenea, a diciembre de 2020, la tonelada habría costado aproximadamente 1.700 dólares, lo que es 1,7 dólares el litro (Bs 11,8). Esta estimación, si se utilizara de referencia para el país, estaría por encima del: estimado para el biodiésel (entre Bs 6,93 y Bs 6,28), del precio promedio de importación del diésel (Bs 10), y muy por encima el precio subvencionado de diésel en el mercado interno que es de Bs 3,72 el litro[1].
Siguiente artículo: 7. ¿Cuánto combustible fósil demandará la producción de biodiésel y HVO?
[1] Según las estimaciones de YPFB, el barril de biodiésel que salga de estas instalaciones, tendrá un costo un 60% inferior que un barril de petróleo fósil importado con los precios actuales del mercado internacional.
Comparte esto:
Me gusta esto: